[ El Orfanato / S-Time ] Una ruta por el misterio, a lo Iker Jiménez (Junio 2018, Madrid)


[Sala Cerrada: No es posible disfrutar de esta aventura]

Sábado por la tarde. La ciudad de Madrid está que arde. No tenemos una idea mejor que irnos a jugar a un lugar fresquita. De tranquis que se suele decir. Aunque lo de de tranquis no parece que sea algo que esté muy claro. La sala elegida es El Orfanato de S-Time Escape Room. Llegamos a la hora acordada, diez minutos antes de la hora reservada, y bajamos las escaleras, que harían las delicias de Kylie Minogue y sus bailarines para bajar, que llevan a un amplio hall donde nos recibe el que será nuestro Game Master... Empieza la investigación junto a Gallegos Escapistas.

Nuestra historia es la siguiente (Carraspeo y empiezo a hablar con tono misterioso): "Sois antiguos trabajadores de un orfanato del que fuisteis despedidos sin explicación. Tras muchos años, decidís ir a visitarlo, y al llegar veis que el edificio está abandonado y con muy mal aspecto. Dentro notáis un ambiente enrarecido, cuando de repente algo cierra la puerta tras vosotros, sin que podáis volver a abrirla. Solo os queda seguir adelante... y descubrir la verdad sobre lo que sucedió"

Sí, la de por toda una generación se quedó tocada con Mulder & Scully por lo que les da por meterse en lugares poco recomendables, cuales adolescentes protagonistas de slashers.


Bien, claro, lo normal. Quedas con tus amiguis que hace siglos que no ves. Vas a tu antiguo trabajo, ves que el edificio está fatal, entras y te encierras. ¿Quién eres? ¿Gloria Serra en un momento de subidón? ¿Paco Lobatón buscando a un familiar perdido?. Ya hemos aceptado la misión así que no hay más remedio que entrar. Antes hago la pregunta de "listillo que ha jugado a muchas salas": "¿Qué tipos de candados hay?". La respuesta: Ninguno. Agacho las orejas y entro por la puerta sin mirar al Game Master. Nos encierran, comienza el misterio.

La sala, es verdad, no tiene ningún candado y todo juega con elementos tecnológicos. Una sala de terror tiene elementos que hacen que sea más intrigante y hay algunos de ellos que están muy bien utilizados que hacen que uno tenga momentos de tensión. Por desgracia, aunque yo botara alguna vez, no llega a acojonarte de verdad y es más amagos de sustos.  El orfanato parece que además de estar abandonado le han robado cosas porque da la sensación de una falta de elementos.

Cuando no pagas la luz pasa lo que pasa. Qué viene, se va... hasta que nunca vuelve ¡CORRE!

Los juegos son bastante asequibles, aunque hay especialmente uno -que es más de cálculo que otra cosa, de esos que de pequeño en el cole se te daban mal- que me parece un quebradero de cabeza. No por la dificultad sino porque estuvimos unos diez minutos de reloj, tirando por lo bajo, buscando la solución con lo que tuvimos un amago de "Me estoy empezando a cabrear" pero por suerte no llegamos a tenerlo. Más gracias a nosotros mismos que otra cosa.

Por lo demás, los juegos son entretenidos, hay momentos de no saber que va a pasar y tiene una historia la cual se va avanzando a medida que vas jugando. Conseguimos salir a falta de tres minutos de reloj y, realmente, pasamos un buen rato. Foto de recuerdo y vayamos a tomar una cervecita que nos hace falta.

Ummmmm, aquí algo no encaja. Esa mirada es un poco "Corazón Congelado" de Pastora Soler



Cosas a mejorar:

- El clásico de este blog es el de "Muerte a los walkies" y añadiré en esta ocasión "Muerte a las salas donde el Game Master no escucha lo que pasa en la habitación". Sospecho que esto sucede en El Orfanato porque en la susodicha prueba llegamos a tener la opción correcta pero creemos que nuestro dueño y señor no se enteró que ya lo habíamos puesto (o al menos intentando poner).

- No se puede dejar a un grupo más de 10 minutos atascado. Mira, que podíamos tener el momento lerdo pero ya había un momento que estábamos dos personas sentadas que a mí me dieron ganas de tumbarme a ver si así pillaban que ya esto empezaba a ser cansado.

- La tematización se queda algo escasa. Ya hay una oferta muy amplia, competencia y empieza a suceder que el contraste entre las salas puede llegar a ser abismal. En tematización incluyo la presentación del juego para meterte de lleno en él (En eso Maximum Escape en Barcelona saben hacerlo estupendamente).

Tu tienes el poder. Esto es el antecedente de Mr. Wonderful. De fijo.



Pros:

- Los juegos son todos tecnológicos por lo que no hay ningún candado. Si sois anticandados, esta sala os va a gustar porque no hay ni uno... ni tampoco ni una sola llave. Gol doble para anti juegos clásicos.

- La forma de comunicación con el jugador, el audio es muy importante en esta sala y hace que te envuelva en la historia de una forma muy buena. La forma que funciona, la implicación en las pruebas e incluso en las pistas "base" que se dan a los jugadores.

- Que tenga una historia de comienzo a fin. Que la historia se explica y se entiende porque suceden las cosas, porque estás haciendo lo que estás haciendo y que las pruebas estén inmersas en dicha historia. Aunque suena que esto debería ser en todas las salas, como he dicho alguna vez, a veces no pasa.

- El Game Master, aunque en mi grupo hay variedad de opiniones, pero creo que si que estaba metido en el juego y tenía esa cercanía. Jugaba en la introducción con el grupo. A mí me cayó bastante bien y eso es un punto a favor a tener en cuenta.

- Aunque no es específico del juego, el Hall, la amplitud y que puedas coger algo para beber es un punto extra. En algunas salas cuando sales muerto de sed... sigues muerto de sed hasta que sales del local o bebes agua en los baños cual perrillo atravesando un desierto.

Pues aleee ¡A jugar a El Orfanato!

Conclusión: Juego interesante

A más salas uno juegue empieza a buscar un nivel. El mío está en tematización, jugabilidad y el Game Master. En este caso hay dos de esos tres elementos, el de tematización está en Insuficiente con recuperación para septiembre, con lo que si no buscáis un terror de salir con un infartito, os gustan los juegos tecnológicos y los juegos en equipo, vais a poder pasar un buen rato en El Orfanato porque yo si que lo disfruté.


Calle Hilarión Eslava 34, 28015 Madrid (Metro más cercano: Moncloa, Línea 3 y 6)

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